El Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE) es mucho más que un simple aliño. Su riqueza en antioxidantes naturales, ácidos grasos saludables y compuestos bioactivos lo convierten en un auténtico ingrediente funcional. Con la llegada del calor, el AOVE también se adapta y se reinventa en la cocina: desde sopas frías hasta cócteles, pasando por helados o vinagretas llenas de vida.
En este artículo te contamos 5 formas creativas, nutritivas y veraniegas de usar AOVE, con todas sus propiedades nutricionales intactas. Una invitación a saborear Monsieur Pego también en frío.
1. Sopas frías más cremosas y sabrosas
El AOVE es un emulsionante natural, ideal para dar cuerpo a sopas frías como el gazpacho, el salmorejo o el ajoblanco. Aporta textura sedosa y potencia los aromas gracias a sus compuestos volátiles liposolubles. Además de mejorar la experiencia sensorial, mantiene intactos sus beneficios antioxidantes al no someterse a altas temperaturas.
2. Vinagretas funcionales para ensaladas vivas
Una vinagreta con buen AOVE no solo eleva el sabor, también mejora la absorción de vitaminas presentes en las verduras crudas (A, D, E y K). Su perfil de ácido oleico contribuye al bienestar cardiovascular y, combinado con ingredientes como limón o mostaza, crea emulsiones estables sin aditivos artificiales.
3. Helados y sorbetes más saludables
Sí, el AOVE también puede usarse en recetas dulces. En pequeñas cantidades y bien emulsionado, aporta textura cremosa y estabilidad a helados y sorbetes sin necesidad de nata ni grasas saturadas. Su punto de fusión bajo lo hace ideal para crear postres ligeros y con un perfil nutricional más limpio.
4. Cócteles creativos con alma mediterránea
Cada vez más bartenders experimentan con gotas de aceite de oliva como elemento aromático. Aporta matices herbáceos, frutales o ligeramente picantes según la variedad, y eleva la experiencia sensorial de cócteles veraniegos, sin alcohol o con él.
5. Aperitivos funcionales y sabrosos
Desde una simple tostada con tomate hasta una base de hummus con crudités, el AOVE no solo da sabor, también protege ingredientes frescos y mejora la absorción de nutrientes. Su actividad antioxidante y antimicrobiana ayuda a mantener la calidad del plato por más tiempo, de forma natural.
El verano es la estación perfecta para descubrir el lado más fresco y funcional del Aceite de Oliva Virgen Extra. Incorporarlo en recetas frías no solo mantiene todas sus propiedades nutricionales, también abre la puerta a nuevas experiencias gastronómicas: ligeras, saludables y llenas de sabor.
Con Monsieur Pego, el AOVE deja de ser un acompañamiento para convertirse en el protagonista.
